Hay un dicho que dice, «con buena polla bien se folla»… en cualquier red social sería, «con buen espejo buena porra»…
Al igual que la anorexia, la bigorexia es una forma de dismorfia corporal, un trastorno psiquiátrico en el que las personas centrarán su atención en un defecto percibido.
Con los anoréxicos, el defecto es ser demasiado gordo, mientras con bigoréxicos, estás siendo demasiado flaco; de hecho, la bigorexia a veces se conoce como anorexia inversa.
La bigorexia actualmente afecta a miles de atleta en todo el mundo, pero la afección es más común en hombres y a menudo comienza a fines de la adolescencia, porque todo empieza cuando no ves que estás creciendo como los demás.
Pero no todos los culturistas son o somos bigoréxicos porque hay una diferencia entre querer crecer y estar obsesionado e insatisfecho con el cuerpo.
¿Cuáles son los síntomas de la bigorexia?
Además de pasar horas al día obsesionándote con la idea de que tu físico está subdesarrollado, si haces algunas o muchas de estas cosas estás con bigorexia.
- Dejar de hacer cosas importantes que puedan interferir con el entrenamiento.
- Comparar constantemente el físico de uno con los demás.
- Mirar el espejo repetidamente durante todo el día.
- Disfrutar de los restaurantes o de otras invitaciones.
- Desarrollar trastornos alimenticios como la bulimia.
- Ser dependientes de la química.
- Entrenar en sobre-entrenamiento.
- Esconder el cuerpo.
En fin, un bigoréxico nunca está siendo satisfecho con la apariencia y, desde este punto de vista las cosas se complican porque la vida se pierde y el estrés empieza a comerte el cerebro, que es lo peor.
¿ Vives la realidad cuando te preparas ?